Gerard Piqué, conocido por su destacada carrera futbolística y su pasada relación con Shakira, recientemente se aventuró en el mundo del modelaje, pero la respuesta del público no fue la esperada.

Después de mantener un perfil bajo tras su separación con la reconocida cantante colombiana, Piqué decidió mostrar su faceta como modelo en unas fotos que generaron una sorprendente ola de críticas en las redes sociales.

A pesar de su éxito en el campo de juego, los internautas no tardaron en comentar sobre supuestas arrugas y señalar que “ya se ve viejo”.

Estas observaciones se suman a la persistente controversia que rodea al exfutbolista desde su infidelidad a Shakira, recordando al público las consecuencias de sus elecciones en su vida personal.

El intento de Piqué por resurgir en el ámbito público ha reavivado la atención sobre su vida amorosa y profesional. Las redes sociales se llenaron de comentarios cuestionando la elección del modelo y recordando su pasado con la artista colombiana, generando una discusión sobre la aceptación del público hacia las figuras públicas.

La polémica en torno a estas fotografías subraya la conexión entre la vida personal y la percepción pública de las celebridades, mostrando cómo las decisiones pasadas pueden seguir afectando la imagen de una figura pública, incluso cuando intenta diversificar su carrera.

En un mundo donde las redes sociales amplifican las opiniones, Gerard Piqué experimenta las complejidades de la atención pública, un recordatorio de que la fama conlleva no solo éxitos, sino también el escrutinio constante de un público ávido de juicios.