La extraña cama que haría vivir a Michael Jackson hasta los 150 años
Desde la extravagancia hasta los avances médicos más curiosos, la vida de Michael Jackson nunca dejó de sorprender al mundo. Sin embargo, una de las historias más fascinantes que rodean al “Rey del Pop” involucra una peculiar cama que, según algunas teorías, podría haberle permitido vivir hasta los 150 años.
Se trata de una cámara hiperbárica, un dispositivo que Michael adquirió en la década de los 80. Esta cama presurizada fue diseñada originalmente para acelerar la recuperación de lesiones y enfermedades graves. Funciona suministrando oxígeno puro en un ambiente con mayor presión atmosférica de lo normal, lo que permite que el oxígeno se disuelva más eficientemente en el plasma sanguíneo. En teoría, esto ayuda a reparar células dañadas y combatir el envejecimiento.
¿Por qué Michael Jackson usó la cámara?
Jackson no solo era un ícono musical, sino también alguien obsesionado con la salud y la longevidad. Según informes, se creía que dormir dentro de esta cámara hiperbárica le permitiría ralentizar el proceso de envejecimiento y mantenerse joven durante más tiempo. Aunque el cantante afirmaba estar en busca de longevidad y bienestar, muchos también consideraron que su fascinación con estos tratamientos era una expresión más de su estilo de vida excéntrico.
¿Realmente la cámara podía extender la vida hasta los 150 años?
La medicina hiperbárica tiene usos legítimos, especialmente en el tratamiento de heridas difíciles de curar, intoxicaciones por monóxido de carbono e infecciones severas. Sin embargo, la idea de que pueda prolongar la vida a tal extremo aún no tiene evidencia científica sólida. Si bien mejora la oxigenación de los tejidos y puede tener ciertos efectos antienvejecimiento, los expertos advierten que no existen pruebas concluyentes de que una cámara hiperbárica pueda asegurar la longevidad extrema.
Un mito más en la vida del “Rey del Pop”
En realidad, Jackson dejó de usar la cámara poco tiempo después de que se popularizara la historia, aunque la leyenda ya había echado raíces. Años después, algunas fuentes afirmaron que el artista nunca durmió realmente en la cámara de forma habitual, sino que la compró para donarla a hospitales infantiles.
Michael Jackson falleció en 2009 a los 50 años, muy lejos de los 150 que supuestamente aspiraba alcanzar. A pesar de esto, su búsqueda incesante por la juventud eterna sigue siendo uno de los muchos enigmas que lo rodean, consolidando su legado como uno de los personajes más intrigantes de la cultura pop.
¿Habría vivido más años si hubiera seguido usando la cámara hiperbárica? Nunca lo sabremos con certeza, pero lo que sí es indudable es que la vida de Michael Jackson estuvo marcada por una constante búsqueda de lo extraordinario, tanto dentro como fuera del escenario.
