La tarde era fresca y tranquila en Barcelona, pero la atmósfera en la casa de Shakira estaba lejos de ser pacífica. Los últimos meses habían sido un torbellino de emociones para la cantante colombiana. Desde su separación pública y dolorosa con Gerard Piqué hasta los rumores sobre su nueva relación con el famoso piloto de Fórmula 1 Lewis Hamilton, y ahora, con su boda con Hamilton a tan solo unas semanas de distancia, parecía que las cosas solo se complicaban aún más.

Shakira se encontraba en el salón de su casa, un elegante espacio decorado con recuerdos de sus giras y premios, rodeada de un equipo de planificadores de bodas, su madre y algunas amigas cercanas. El ajetreo era palpable: llamadas telefónicas interminables, decisiones sobre flores, comida, música. Ella trataba de concentrarse en los detalles, pero su mente seguía volviendo una y otra vez a los problemas recientes. Desde que su relación con Hamilton se había hecho pública, los medios de comunicación no habían parado de especular sobre la posible reacción de Piqué. Algunos decían que él estaba furioso; otros, que estaba dolido.

Celebrity News, Entertainment News, Celebrity Gossip, Celebrity Insider

Pero Shakira sabía la verdad. Gerard no iba a dejar que esta boda sucediera sin hacer algún tipo de maniobra para sabotearla. La cantante lo conocía demasiado bien; había compartido con él más de una década de su vida. Sabía que, cuando Piqué se proponía algo, era implacable.

Ese mismo día, Piqué estaba sentado en su oficina revisando su móvil con una expresión de concentración profunda en su rostro. Había recibido un mensaje de uno de sus amigos más cercanos: “¿De verdad vas a dejar que esto pase sin más?” El mensaje estaba acompañado de un enlace a una noticia de última hora sobre la boda de Shakira y Hamilton, con fotos de los dos juntos, sonriendo y tomados de la mano.

Celebrity News, Entertainment News, Celebrity Gossip, Celebrity Insider

La mandíbula de Piqué se tensó. Él había intentado mantenerse alejado de todo esto, intentando concentrarse en su carrera y en su nueva vida, pero ver esas imágenes era como un puñetazo en el estómago. Se levantó de su silla y empezó a caminar de un lado a otro de la habitación. Sabía que estaba siendo irracional, que no tenía ningún derecho a sentirse así después de todo lo que había pasado, pero no podía evitarlo. Una parte de él todavía amaba a Shakira, o al menos amaba la idea de lo que solían ser. Además, la idea de que ella se casara con alguien como Hamilton, tan diferente de él en todos los sentidos, le irritaba profundamente.

Después de unos minutos de reflexión, tomó una decisión. Sabía que tenía que hacer algo. No podía quedarse de brazos cruzados mientras la mujer que había sido el amor de su vida se casaba con otro hombre. Pero, ¿qué podía hacer? No podía simplemente aparecer en la boda y armar un escándalo; eso solo lo haría ver como un loco. Necesitaba un plan más sutil, algo que fuera lo suficientemente inteligente como para desestabilizar la situación sin levantar demasiadas sospechas.

El ENFADO de Piqué tras ver LA BODA de Shakira y Lewis Hamilton 😳 ...

Llamó a su amigo, el mismo que le había enviado el mensaje, y discutieron varias ideas. Algunas eran tan absurdas que las descartaron inmediatamente, pero finalmente surgió algo que parecía prometedor. “Tengo un contacto en el mundo del espectáculo”, dijo su amigo. “Podemos hacer correr algunos rumores, cosas que podrían hacer que Hamilton dude. No tiene que ser nada demasiado escandaloso, solo lo suficiente para sembrar la semilla de la duda.”

Piqué pensó en esto. Era arriesgado, pero también era lo único que tenía. Sabía que no tenía mucho tiempo, así que dio luz verde al plan.

Mientras tanto, Shakira había empezado a notar que algo no estaba del todo bien. Hamilton, que siempre había sido tan abierto y comunicativo con ella, parecía estar más distante últimamente. Sus conversaciones por teléfono eran más breves, sus mensajes menos frecuentes. Al principio pensó que quizás estaba ocupado con su temporada de carreras, pero luego empezaron a surgir otras señales. Amigos en común comenzaron a hacer preguntas extrañas, insinuando problemas que ella no entendía del todo.

Un día, mientras revisaba las noticias en línea, se topó con un artículo que la dejó helada. Decía que Hamilton había sido visto en una fiesta con una modelo famosa y que los dos parecían muy cercanos. El artículo mencionaba que la boda con Shakira estaba en duda, citando fuentes cercanas que afirmaban que Hamilton no estaba seguro de querer seguir adelante con el matrimonio.

Shakira sintió que le faltaba el aire. Sabía que estas cosas podían ser fabricadas, pero también sabía que en cada mentira hay un grano de verdad. ¿Y si Hamilton realmente estaba dudando? ¿Y si Piqué estaba detrás de esto? Decidió hablar con Hamilton directamente.

La INSÓLITA REACCIÓN de Piqué a La Boda De Shakira y Lewis Hamilton ...

Esa misma noche lo llamó y le pidió que fueran sinceros el uno con el otro. Hamilton, sorprendido por su tono serio, la escuchó en silencio mientras ella le contaba sus preocupaciones. Cuando terminó, hubo un largo silencio al otro lado de la línea. “¿Zac?”, dijo finalmente Hamilton, usando el apodo cariñoso que había adoptado para ella. “Te amo. Quiero casarme contigo, pero tengo que admitir que todo esto ha sido difícil, no porque dude de ti, sino porque siento que hay demasiada presión. La prensa, nuestros amigos, incluso Piqué. No sé si estoy manejando esto bien.”

Shakira sintió un peso en su pecho. “¿Qué tiene que ver Piqué con esto? ¿Qué no quiere que esto suceda? ¿Qué está tratando de hacer, que yo piense que no es una buena idea? Chismes, pero a veces es difícil no dejar que esas cosas te afecten.”

Shakira cerró los ojos. Por supuesto que era Piqué, ¿quién más? Sabía que él no iba a dejarla ir tan fácilmente, que iba a luchar con todo lo que tenía. Y ahora estaba logrando exactamente lo que quería: sembrar la duda. Decidió que tenía que hacer algo drástico para cortar de raíz todo este drama. Decidió ir de frente a la fuente del problema.

Al día siguiente, Shakira se dirigió a la oficina de Piqué. Sabía que no sería fácil confrontarlo, pero también sabía que no podía permitir que él arruinara su felicidad. Cuando llegó, fue recibida con sorpresa por los empleados de la oficina, pero nadie se atrevió a detenerla. Todos sabían quién era ella y el historial que tenía con Piqué.

Piqué estaba en medio de una reunión cuando su secretaria entró y le susurró al oído que Shakira estaba afuera. Sorprendido, detuvo la reunión de inmediato y salió a encontrarse con ella. Cuando la vio, su corazón dio un vuelco. Ella estaba tan hermosa como siempre, pero también podía ver la determinación en sus ojos.

REVELAN NUEVAS IMÁGENES de LA BODA de Shakira y Lewis Hamilton En Miami ...

“¿Qué haces aquí?”, preguntó, tratando de sonar indiferente.

“Necesitamos hablar”, dijo ella sin preámbulos. “Sé lo que estás haciendo, Gerard, y quiero que pares ahora.”

Piqué la miró, fingiendo no entender. “No sé de qué estás hablando, Shakira.”

Ella dio un paso más cerca, sus ojos ardían con una furia contenida. “Sabes exactamente de qué estoy hablando. Estás tratando de sabotear mi boda con Hamilton, estás difundiendo rumores, haciendo que las cosas sean más difíciles de lo que ya son. No sé qué crees que vas a lograr con esto, pero te aseguro que no te va a salir bien.”

Piqué sintió que su fachada de indiferencia se resquebrajaba. “No estoy haciendo nada que no sea proteger lo que siento que es mío.”

Shakira se rió, pero no había alegría en su risa. “Gerard, hace mucho que no soy tuya. Tú mismo te encargaste de eso.”

El cruel PLAN de Shakira para arruinar la BODA de Gerard Piqué con ...

Hubo un largo silencio entre ellos. Finalmente, Piqué suspiró, dejando caer la máscara. “No puedo verte casarte con él, Shakira. No puedo. Me vuelve loco pensar en ti con otro hombre.”

Shakira lo miró, sintiendo una mezcla de lástima y frustración. “¿Y crees que yo no sufrí cuando todo se acabó entre nosotros? ¿Crees que no me dolió ver cómo nuestra relación se desmoronaba? Pero estoy intentando ser feliz, y tú deberías hacer lo mismo.”

Piqué bajó la mirada, sintiendo una oleada de vergüenza. Sabía que tenía razón, pero también sabía que dejarla ir no iba a ser fácil. Finalmente asintió. “Lo siento, Shakira. De verdad. Prometo que no volveré a interferir.”

Shakira lo miró por un momento más, tratando de discernir si él realmente hablaba en serio. Finalmente asintió y se dio la vuelta para irse. “Espero que mantengas tu palabra”, fue todo lo que dijo antes de salir de la oficina.

Los días siguientes fueron tensos, pero poco a poco las cosas comenzaron a calmarse.

VIDEO: